Loading
Editora: María Luisa Prieto
Principal
Poetas
Abbás Beydún
Abdo Wazen
Abdul H. Sadoun
Abdulrazq Al-Rubayi
Adonis (Ali Ahmed Said)
Akl Awit
Al-Bayati
Al-Sayyab
Ali Al-shalah
Amal Dunqul
Bassam Hayyar
Fadwa Tuqan
Hasab Al Shayj Yaafar
Ibrahim Nasrallah
Inaya Yaber
Isa Al-Yasiri
Issa Majluf
Kamal Sebti
Mahmud Darwish
Muhammad Al Magut
Muhsin Al Ramli
Muin Basisu
Nada El Haye
Nazik Al Malaika
Nizar Qabbani
Paul Shaul
Qasim Hadad
Saadi Yusuf
Salah Hassan
Salman Dahud
Samih Al Qasim
Sargón Bulus
Shauki Abi Shakra
Talib Abdelaziz
Unsi Al Haye
Wadih Saadeh
Yabra Ibrahim Yabra
Yumana Haddad
Yusuf Al Jal
Poesía palestina
Mahmud Darwish
Yabra I. Yabra
Fadwa Tuqan
Muin Basisu
Samih Al Qasim
Ibrahim Nasrallah
Poesia iraquí
Al Sayyab
Nazik Al Malaika
Al Bayati
Sargon Bulus
Saadi Yusuf
Poesía libanesa
Yusuf Al Jal
Unsi Al Haye
Abbás Beydún
Abdo Wazen
Biografías
Libros
Colabora
Contacto
Mahmud Darwish
Traducción del árabe:
María Luisa Prieto
TENGO LA SABIDURÍA DEL CONDENADO A MUERTE
Tengo la sabiduría del condenado a muerte:
No tengo cosas que me posean.
He escrito mi testamento con mi sangre:
"¡Confiad en el agua, moradores de mis canciones!".
He dormido ensangrentado y coronado con mi mañana...
He soñado que el corazón de la tierra era mayor que
Su mapa
Y más claro que sus espejos y mi cadalso.
He creído que una nube blanca me
Ascendía,
Como si yo fuera una abubilla con el viento por alas.
Y al alba, la llamada del sereno
Me despierta de mi sueño y de mi lenguaje:
Vivirás en otro cadáver.
Modifica tu último testamento.
Se ha retrasado la fecha de la segunda ejecución.
¿Hasta cuándo?, pregunto.
Esperaré a que mueras más.
No tengo cosas que me posean, respondo,
He escrito mi testamento con mi sangre:
"¡Confiad en el agua,
moradores de mis canciones!"
Y yo, aunque fuera el último,
Encontraría las palabras suficientes...
Cada poema es un cuadro.
Pintaré ahora para las golondrinas
El mapa de la primavera,
para los que pasan por la acera, el azufaifo
y para las mujeres el lapislázuli...
El camino me llevará
Y yo le llevaré a hombros
Hasta que las cosas recobren su imagen
Verdadera,
Luego oiré lo genuino:
Cada poema es una madre
Que busca a su hijo en las nubes,
Cerca del pozo de agua.
"Hijo, te daré el relevo.
Estoy encinta".
Cada poema es un sueño.
He soñado que soñaba.
Me llevará y le llevaré
Hasta que escriba la última línea
En el mármol de la tumba:
"Me he dormido para volar".
Y llevaré al Mesías zapatos de invierno
Para que camine como los demás
Desde lo alto de la montaña hasta el lago.
Ver versión en árabe